Resulta que ahora el congresista Montoya pretende formar una comisión parlamentaria para investigar a los supuestos responsables del suicidio del expresidente Alan García, como una maniobra evidente para reescribir la historia en torno a un hecho comprobado. En redes sociales se pretende mitificar la imagen de Alan García y se teje hasta la versión de que García estaría vivo.

Este despropósito del congresista Montoya no es nuevo. Ya lo quisieron hacer antes y puedo testimoniar de las pretensiones que tuvo el excongresista Jorge del Castillo de utilizar la Comisión de Defensa de entonces, donde pretendieron armar un show para responsabilizar a la Policía Nacional del suicidio de Alan García. Todo esto fue desbaratado por la contundencia de los argumentos que esgrimieron los policías y que además salieron bien parados del corralito que le habían armado los apristas y fujimoristas.

Quedan las imágenes de esa sesión de la Comisión de Defensa de 2019, donde un oficial muestra el chaleco antibalas respondiendo a los improperios de varios congresistas que se arrogaban la autoridad para faltarles el respeto a valientes oficiales de la Policía Nacional; como si ellos fueran responsables de las decisiones personales que tomó Alan García, cuando es evidente que se trataba de un tema de salud mental y estrictamente personal del suicida.

A estos negacionistas habría que recordarles que el operativo policial se hizo en el marco de la ejecución de una resolución judicial y el titular de la acción penal es la Fiscalía y la Policía solo se limita a garantizar la ejecución de dicha medida judicial, cumpliendo órdenes establecidas en un protocolo. Esa intervención fue un megaoperativo en paralelo, que comprendía la detención y el allanamiento de los domicilios de varios cómplices de García, que por cierto fue delatado por sus allegados más íntimos, Nava y Atala, que confesaron ser los testaferros de él.

Estas pretensiones de Montoya son hasta morbosas y creo que debe afectar hasta a la familia de Alan, que seguro busca que ya descanse en paz, por un tema de humanidad. Aunque al parecer hay grupos interesados en torcer la realidad, por eso hacen hasta películas y crean comisiones congresales para elucubrar una historia surrealista de la vida controversial que tuvo Alan García.